La Caleta de Totoralillo Norte nace a partir de la decisión de 36 pescadores artesanales provenientes de la Caleta Hornos (Región de Coquimbo), quienes se proponen crear un asentamiento que les permitiera conservar sus rasgos identitarios, la conservación de su entorno y la extracción y comercialización de su faena pesquera. Para esto se centraron en 3 líneas de desarrollo: social y educativo, empresarial y de desarrollo marino. El proceso de evolución de esta iniciativa se caracterizó por su carácter de autogestión, de identidad y de cooperación en redes tanto gubernamentales como privadas, con esto han logrado incrementar en un 200% su capital inicial, gestionar proyectos externos, viviendas para toda la comunidad, caminos, agua potable, electrificación y un muelle embarcadero. La principal clave de su éxito en gestión ha sido la cohesión social y el sentido de bienestar colectivo, asimismo la flexibilidad que han mostrado para adaptarse a situaciones emergentes.